Aunque el 98% de las madres españolas desea dar el pecho como primera opción, el 40% abandona la lactancia a los tres meses debido a la mastitis. Por otra parte, se ha demostrado que la cepa probiótica Lactobacillus salivarius PS2 puede reducir el riesgo de desarrollar mastitis hasta en un 59% de los casos.
Se ha visto que la mastitis es la principal causa de abandono temprano de la lactancia materna. En concreto, se estima que se producen más de 11 episodios de mastitis por cada 1.000 semanas de lactancia, la mayoría de ellos en el primer mes”
La mastitis es dolorosa y debilitante. Por ello, 1 de cada 4 mujeres decide dejar de dar el pecho, lo que convierte a esta inflamación en la primera causa de tipo médico para un destete precoz e indeseado. De media, entre un 20 y un 25% de las madres está en riesgo de desarrollar mastitis, patología cuya incidencia alcanza el 10% entre las mujeres que dan el pecho.
Teniendo en cuenta que la leche materna es el patrón de oro de la alimentación del bebé, cabe destacar la importancia de trabajar en la prevención de la mastitis para reducir la probabilidad de interrupción de la lactancia materna. Por ello, “es importante tomar medidas de prevención, como el asesoramiento sobre lactancia (amamantar en función de la demanda del bebé y minimizar el uso de extractores de leche y pezoneras), tratar el dolor, tener una hidratación y descanso suficientes, evitar el masaje profundo y utilizar sujetadores de lactancia adecuados
Se ha demostrado que algunos probióticos son eficaces para la prevención de la mastitis y son una buena alternativa o complemento a la terapia con antibióticos.
En concreto,se ha demostrado la eficacia de la cepa probiótica Lactobacillus salivarius PS2 (actualmente llamada Ligilactobacillus salivarius PS2) para ayudar a prevenir esta complicación de la lactancia. “El mayor beneficio que tiene es que fortalece todos los mecanismos (bioquímicos, inmunológicos y microbiológicos) implicados en el fortalecimiento de la barrera epitelial en el ámbito mamario y en la prevención de una proliferación excesiva de las bacterias habitualmente implicadas en casos de mastitis”. De este modo, se ha visto que puede reducir el riesgo de desarrollar mastitis hasta en un 59% de los casos,
Un papel fundamental también en la prevención de la mastitis lo ejercen las matronas. Es fundamental que las matronas identifiquen los posibles casos de mastitis en fases iniciales. Aquí, cabe destacar el trabajo de las sociedades científicas en la realización de guías y protocolos para identificar, entre otras cosas, las causas de abandono de la lactancia”